sábado, 17 de abril de 2010

No sólo mi cuento...

... es el que se ha quedado sin el 'and they lived happily ever afer' (y ellos vivieron felices para siempre). Al mismo tiempo que yo estoy vagando por Waverly Place, buscando la magia que he perdido, a otras princesas tampoco les ha ido tan bien, como era de esperar, tras cerrar las páginas de sus historias.



Bestia se convirtió en un afamado y aclamado actor de Hollywood y, de la noche a la mañana, abandonó a Bella por otra mucho más joven. Ella, que ya ha cumplido sus añitos, está obsesionada con querer representar aún su hermosura del pasado y en consecuencia se dedica a buscar el secreto de la eterna juventud y la belleza inmortal. Algún día se le acabará la piel que estirar, pero mientras tanto ahí está de quirófano en quirófano.
Los enanos formaron la banda de rock 'Los Aiiiiihoooo' y están cosechando grandes éxitos con sus giras por todo el mundo. Por su parte, tradiconal ella, Blancanieves dejó de comer manzanas y se casó. No se ha librado de tener que mantener la casita del bosque en orden, además de cuidar de su nueva generación de 'enanos' y tragarse al príncipe más vago del universo... Y mira que los enanos originales le propusieron hacer los coros de sus temas, pero ella nada, empeñada en llevar a su familia para adelante.
La Bella Durmiente, como todos sabemos, se despertó, pero viendo el panorama se volvió a quedar dormida y, ahí sigue eschándose una sietecita. Mientras tanto, a su príncipe azul han tenido que meterlo en un asilo para la tercera edad, pues nadie de su época quiere hacerse cargo de él y sus delirios de senilidad en los que cree que su novia va a volver a despertarse... Tu sigue esperando, hombre, que la esperanza es lo último que se pierde.
Caperucita Roja entró en una produnda depresión. Nunca superó que primero el lobo se comiera a su abuelita y luego el cazador cometiera aquella masacre, delante de sus tan infantiles ojitos, para salvarle la vida a la anciana. Una noche, se escapó del psiquiátrico dónde la habían encerrado y, después de comerse ella al licántropo, se aficionó a la comida basura, los dulces, todo tipo de refrescos y, como no, al chocolate suizo. Ya no han intentado volver a internarla más y se dice que es el terror de los picnics... Se come todo lo que encuentra en las cestitas.

La Sirenita, la única que ha muerto hasta la fecha. Unos pescadores japoneses se la encontraron de camino cuando venían al estrecho de Gibraltar por la pesca del atún barbateño. Se les ocurrió atraparla con una de sus redes, se dice que con la intención de exponerla en un acuario, sin embargo, una noche apareció muerta en la borda del pesquero japonés con un arpón que la atrevesaba de izquierda a derecha. Los nipones mantuvieron en su defensa ante las autoridades portuarias que su muerte fue accidental porque como no tenía piernas le costaba desplazarse, tropezó y cayó de costado, pero me temo que desde el principio pensaron en conventirla en sushi.
Cenicienta, cansada de la vida de palacio y las fiestas con gente refinada y educada, se aficionó a los locales abiertos hasta el amanecer, con gente de más baja alcurnia pero con más de idea de cómo pasarlo bien. Descubrió que lo que más le gustaba era trasnochar, bailar, terminar la juerga en los 'after hour' y fue consciente de toda la diversión que se había estado perdiendo por recogerse cada medianoche.
Sólo hay un pequeño problema, aseguran las malas lenguas que le gusta demasiado empinar el codo.
Jasmine tuvo una maravillosa historia de amor con Aladín que les duró exactamente 1.000 y una noches; después de eso, se les apagó la chispa de la pasión y la atracción, algo lógico con tanto viento del desierto. Para olvidarlo, se puso a estudiar y se doctoró en Ciencias del Mar. Como después de enviar 1.000 y un currículums no encontraba trabajo, se metió en las fuerzas armadas [que no iban a enseñarle nada, pero era un sueldo seguro _ésto no es mío, pertenece a la chirigota 'Los Yestredays' de un comparsista gaditano_, pero es que encajaba aquí de lujo] y ahora es la adversaria más cañera de las tropas aliadas que se establecen en las fronteras de su país para apoderarse de su oro negro.



* * * * *


Colorín, colorado, parece que los cuentos aún no han terminado :D











6 comentarios:

Quequieresquetediga dijo...

Hola bonita. He dejado de pasear unas semanas porque he estado enferma y vengo y me encuentro con esto. Mira, yo no se de que va la cosa, pero no te me vengas abajo por eso, hay que seguir para adelante. Es facil dar consejos, pero el se lo pierde si te deja escapar. En las Canarias se te quiere mucho, eso no lo olvides. Tienes que seguir escribiendo tu cuento. Un beso gigante, como esos que tantas veces nos regalas.

VgGIrL dijo...

Wowww.. jejeje
en la única en la que creo que no hay tanta masacre es en la de la Cenicienta..
lástima por las demás

Saludos :D

Mica dijo...

Es que eso de que comieran perdices y fueran felices para siempre me parecía muy raro. Ahora, que a todas les saliera rana la historia es un poco depre no? No me vas a poner alguna con final feliz? o por lo menos un final un poco más abierto? Un besote.

Byron y Xinver dijo...

Me encantan estas versiones post-- lo que sea de los cuentos. Un abrazote.

El chico de ayer dijo...

Existen cuentos que sí que terminan bien, muchos otros tienen un final divertido y los hay que no acaban igual de bien para sus protagonistas. Hay de todo, pero recuerda: nadie se muere por nadie. ¡Ánimo guapa!

Fabián Buelvas dijo...

las ilustraciones que consigues son excelentes, me gustó el último, el de Jazmin.
Un abrazo.